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Ficha:
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- Mapa de situación:
6.4 km, 00:06:07
- Descripción:
Impresiona la cima del Beriain cuando te vas acercando a la Sierra de Andía. Apenas se había retirado la primera nevada de los altos. Las cotas seguían blancas destilando arroyos hacia los valles. Las torrenteras fluían suavemente entre pinos, hayedos, castaños, nogales, hacia los valles; fluyendo arroyo aquí, torrente allá, agua recién nacida de entre los nubarrones y los riscos de la sierra. Nieve fría y podrida que se desparrama sin control ladera abajo, mil metros de desnivel físicamente puros. Todo hacia los valles. Suavemente, lentamente, hacia los valles. La vida nos viene de los altos. Es por esto que nuestro instinto nos lleva a los altos. 4 de diciembre del 2005. Llegamos a YABAR (IABAR) a las 8,30 horas de la mañana. El pueblo duerme ajeno a nuestra aventura de fin de semana como si la vida dominguera le fuera ajena.
Aparcamos el coche inmediatamente debajo del paso del tren a la entrada del pueblo. El viento nos provoca las primeras lágrimas en los ojos. Fría la mañana cuando comenzamos la andadura. Del pueblo YABAR tomamos dirección sur pasando debajo del tren y de la autopista, justamente por el Camino Zalduondo y en dirección a la sierra. Es visible un gran corazón que se dibuja en el hayedo en la ladera justo en los comienzos de la trepada. Hay que ir a por él. En dirección al gran corazón. En medio de unos corrales enfilamos la PISTA empedrada. Al poco pasamos VALLA1 y tomando por el camino central nos dirigimos por CAMINO, dejando la pista a la derecha, hacia otra VALLA metálica. Y en dirección sur nos vamos hacia punto CORAZON en la base de la muralla. Hemos podido elegir entre la pista o el camino viejo. En fuertes desniveles vamos ascendiendo hacia CORAZON2 en terreno semidespejado donde el hayedo ha dibujado la gran silueta que semeja un corazón. El camino es claro y marcado. Algunos hitos aseguran nuestra ascensión. Estamos sobre los 1000 m de altitud. Ni un respiro para nuestras cansadas piernas. Varias revueltas a partir de ahora, con nieve que se resiste a fundir ladera abajo. Blanco inmaculado apenas hollado por montañero alguno. Llegamos a IRAÑETA, portillo en los cortados imposibles de la sierra. El paraje a nuestra vista, superado el portillo, es la paramera hacia los altos de Trekua al sur, naveta hacia San Donato al oeste. Soledad, frío viento, paraje absolutamente siberiano que la cámara no puede repetir en toda su belleza. Los mendigoitzales sabemos lo que vemos y no podemos contar. Aquí es el momento. El valle de Ollo se desparrama a nuestra izquierda. Cae lento desde Trekua hacia Arteta, y da de beber a Iruña de fuentes puras recién nacidas. De IRAÑETA a la izquierda vamos desmontando montes sin percatarnos del esfuerzo. La cima de SATRUSTEGUI se nos presenta como una ola petrificada. Toda la sierra de Satrústegui es como una gran ola que paró su ímpetu sumisa ante los contrafuertes de Aralar, ya muchos años atrás. Iñigo de Goñi la paró con su caballo saltando de risco en risco. De Aralar a San Donato a un golpe en la grupa. En lo alto celebramos el cumpleaños de un colega. Muchas primaveras en esfuerzo conjunto que pa,qué contar. Ibéricos, piperak, valdemar, a mil cien metros.
Bajamos raudos y veloces de los brazos de la sierra. Nuestra boca está sedienta por el esfuerzo y los ibéricos. Más por estos últimos. De YABAR a toda pastilla salimos hacia Gasteiz sin parar en prendas. La SEDE SOCIAL (BAR PORTAL DE GAMARRA) nos espera. Tres cañas, seguidas de otras tres, color rubio terciopelo, se precipitan hacia dentro, muy hacia dentro de nuestras entrañas sedientas. Un perro boxer juguetea a nuestro lado. Fuerza y vitalidad a nuestro lado. El niño y la bestia. Todo entre burbujas de cerveza en copas redondas. Redondas como las caderas de una mujer. ¿Qué nos gusta más? ¿La cerveza o la mujer? Todo a su tiempo…
- Fotografías:
